Es “un fuerte golpe a la credibilidad de los indicadores del Banco Mundial” señaló la bancada de senadores PS después de conocer que el economista jefe del Banco Mundial, Paul Romer, aseguró al Wall Street Journal, que la entidad habría modificado constantemente la metodología de medición para mostrar un indicador más bajo durante la administración de Michelle Bachelet, motivado por razones políticas“.
El daño ya está hecho y esperamos, como bancada, que sea corregido cuanto antes y dicha corrección sea explicitada en la misma forma y proporciones como cuando fue mencionada la información errada, o siendo exactos, deliberadamente manipulada.
Como bancada de senadores socialistas creemos que este tipo de acciones no pueden quedar sin investigación y castigo. Hoy, en pleno siglo XXI, la importancia de la verdad en información a nivel global lleva a que este tipo de acciones políticas fraudulentas cobren especial relevancia, por el impacto que tienen, sobre todo en tiempo de elecciones.
La Presidenta ha sido clara: más allá del impacto negativo en la ubicación de Chile en un ranking, esta alteración daña la credibilidad de una institución, que por definición, debe contar con la confianza de la comunidad internacional.
Los senadores socialistas señalaron que si la verdad tiene algún valor para el Banco Mundial, debe iniciarse una investigación para determinar quién manipuló los datos y por qué no existió un control jerárquico que detectara esta manipulación que afectó a Chile y a la administración de la presidenta Bachelet.
El jefe de bancada de los senadores socialistas, Alfonso De Urresti, solicitó que la investigación se extienda a todos los informes e indicadores que prepara y comunica el Banco Mundial ya que la noticia ha puesto en entredicho la credibilidad de todo su trabajo.
“No basta una disculpa. La coincidencia da para pensar en una concertación para perjudicar el intento de esta administración por cambiar el modelo neoliberal imperante. Y la pregunta es qué va a hacer ahora el Banco Mundial con los responsables de esta manipulación. Debe haber un castigo. De lo contrario, quedaría en evidencia que hubo una acción concertada”, aseguró el senador Juan Pablo Letelier.
“Aquellos que negaban la existencia de las campañas del terror tienen aquí un hecho palpable. Los poderes fácticos sobrepasan todo límite y no trepidan en perjudicar a un gobierno y a un país entero en función de determinados intereses políticos”, dijo el senador Rabindranath Quinteros.