La presidenta de Chile, Michelle Bachelet, recibió hoy el premio Figura Pública que entrega la Fundación Iguales, en reconocimiento por el envío del proyecto de ley de matrimonio igualitario y su apoyo al avance de derechos en materias de diversidad sexual en Chile.
“La diversidad sexual existe y nos demanda, con justicia y con razón, que se le reconozcan los derechos que les corresponden”, subrayó la mandataria tras recibir una estatuilla. Resaltó que “en los últimos años, la demanda por la defensa de los derechos de la diversidad sexual ha sido acogida por amplia parte de nuestra sociedad, que ha asumido como propia la necesidad de extender la protección y derechos a todas las personas, sin importar a quien amen o con qué género se identifiquen”.
“Hemos abierto las puertas de nuestra institucionalidad pública al reconocimiento de derechos y adaptado nuestras políticas públicas a la realidad de las personas lesbianas, gays, bisexuales y transexuales (LGBTI)”, subrayó Bachelet.
El primer año recibió el premio Rafael Dochao, embajador de la Unión Europea en el país; el año 2015 fue Álvaro Elizalde, exportavoz de gobierno, por su trabajo en la unión civil, y en 2016 el periodista y conductor de televisión Ignacio Gutiérrez por denunciar la discriminación laboral que estaba sufriendo a causa de su orientación sexual.
Este año, además del galardón para la jefa de Estado, se entregó un reconocimiento a la Superintendencia de Educación en la categoría de “Organismo Público”, por la circular que busca resguardar los derechos de los niños, niñas y adolescentes LGBT en sus establecimientos educacionales.
La Gobernante subrayó que “la diversidad sexual existe y nos demanda, con justicia y con razón, que se le reconozcan los derechos que les corresponden”.
El proyecto de ley de Matrimonio Igualitario modifica la definición de matrimonio del artículo 102 del Código Civil, estableciendo que se trata de la unión entre dos personas. Así se elimina la referencia a que se trata de una unión entre un hombre y una mujer.
Igualmente, se adecúan diversas normas para hacerlas compatibles con matrimonios entre personas del mismo sexo, se eliminan las referencias al “marido” y a la “mujer”, para reemplazarlas por el término neutral “cónyuge” o “cónyuges”, así como también se eliminan las referencias a “padre” o “madre”, estableciendo los términos más inclusivos, como “padres” o “madres”.
La iniciativa considera como régimen patrimonial supletorio la separación total de bienes, establece la posibilidad de que una pareja de mujeres se someta a técnicas de reproducción asistida y se suprime la “conducta homosexual” como causal de divorcio.
También establece la posibilidad de que una pareja de mujeres se someta a técnicas de reproducción asistida y suprime la “conducta homosexual” como causal de divorcio.
Al finalizar sus palabras la presidenta Bachelet reconoció que “queda trecho por avanzar sin duda, quedan derechos por conquistar e igualdad por alcanzar. Pero tengo la certeza que, gracias al trabajo constante de las organizaciones de la sociedad civil, ese camino no se va a detener”.