“Los efectos en este rubro son devastadores y no existe protección”, aseguran desde el Sindicato de Trabajadoras de Casa Particular.
En una nueva transmisión en vivo realizada por la Juventud Socialista a través de sus redes sociales, la vicepresidenta de la Mujer, Antonia Matus Ramírez, conversó con Natalia Flores González, coordinadora de asesorías del Sindicato de Trabajadoras de Casa Particular (Sintracap), sobre la situación de sus derechos laborales en el marco de la emergencia sanitaria.
“Los efectos de la pandemia en las trabajadoras de este rubro son devastadores”, aseguró Natalia Flores. Esto se debe, según explicó, a que más del 53% de ellas ejercen sus labores de manera informal, mientras que las medidas que ha tomado el Gobierno se enfocan en quienes sí gozan de contratos y hacen uso del seguro de cesantía, al cual las trabajadoras domésticas no tienen acceso.
La representante de Sintracap señaló que uno de los graves problemas es que las demandas por derechos laborales para estas trabajadoras no han sido visibilizadas, pese a que representan alrededor del 12% de la tasa de participación femenina en el país. “Estamos hablando de más de 300 mil mujeres, es decir, que una de cada diez mujeres que trabaja en Chile son trabajadoras de casa particular, y una de cada tres de ellas son migrantes”, puntualizó Flores.
Frente a este contexto de desprotección, el Sindicato Trabajadoras de Casa Particular impulsó la campaña #CuidaAQuienTeCuida. Al respecto, Flores apuntó a que “si el empleador puede seguir pagando el sueldo completo, debería seguir haciéndolo. En segundo lugar, se busca que desde el Congreso se impulse la idea de permitir que las trabajadoras se acojan a una modalidad que les permita hacer uso de su indemnización a todo evento, dada la pandemia”.
“Una trabajadora de casa particular que no trabaja un día, no puede parar la olla de su familia”, agregó Flores, advirtiendo que actualmente no existe claridad respecto de cuántos contratos se han suspendido o cuántas trabajadoras han sido despedidas. “Lamentablemente, en el marco de la crisis, muchos empleadores están haciendo que las trabajadoras firmen el finiquito, pese a que esto no es obligatorio para suspender el contrato”.
Finalmente, Natalia Flores dijo que desde el sindicato ya solicitaron al Congreso que se realice la construcción de esos datos. “Una vez que tengamos esa información será necesario transparentarla, para sustentar que las trabajadoras de casa particular representan uno de los sectores más afectados por la pandemia, y se tomen medidas al respecto”, concluyó.